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El amor no es como nos lo pintan. Al principio, flotamos en una nube, sentimos felicidad, amamos con el alma, el cuerpo, y los otros cinco sentidos. Las mujeres nos creemos las dueñas del mundo porque él nos ha elegido. Esa persona especial ha decidido que nosotras seamos el centro de su universo, y lo seremos, pero durante un tiempo. He aquí mi tesis: PRIMER MES: Nubes de terciopelo. El primer mes es el más MARAVILLOSO. Sonrisas tontas, piel de pollo, timidez, ganas de volar, mariposas en el estómago y un millón de etcéteras que todas reconocemos si echamos la vista atrás. Todo es perfecto. Os conocisteis casualmente, erais amigos de toda la vida, era tu amor platónico, era el tío mas gilipollas del grupo, el vecino, el de los bailes de verano, el chico con el que cruzaste una intensa mirada en una discoteca de mierda... si, cada una se identificara con su propia situación, y pensará "Dios, fue tan bonito que estoy deseando tener hijos solo para contarles "Como conocí a vuestro padre". Conforme van avanzando los días, tu sensación de estar a tres metros sobre el cielo se multiplica por tres. Ya no estás a tres metros sobre el cielo, ahora estás en una atmósfera paralela de unicornios, arco iris y terciopelo fucsia. Oh, suena el móvil, es él, te sudan las manos, el corazón se te sale del pecho, cupido te clava flechas hasta en los ojos, y respondes con un tímido a la vez que agudo "¿Siiiiiiiiii?" entonces, el te dirá algo como hola princesa, y ese es el momento, el apoteósico momento en el que tus bragas caerán al suelo cual pluma desde un tercer piso. Posteriormente hablareis durante horas por teléfono porque, curiosamente siempre tendréis tema de conversación, y los silencios serán suspiros de amor recíproco. Por supuesto, aparentareis ser las novias perfectas, donde los celos y las broncas no ocupan lugar, y pensareis que todo lo que hacen está bien, ya que ellos son perfectos, y jamás se equivocan, y si lo hacen, te callas porque es sexy. Acto seguido él te hablará de sus colegas, a los que tendrás un amor irracional simplemente porque respiran el mismo aire que tu novio, y comparten sus mismos gustos. Te hablará de una amiga suya, a la que te morirás por conocer porque tiene que ser super mega inteligente y especial por ser amiga de tu chico. Con el paso del tiempo, este aspecto sufrirá una metamorfosis. Respecto al tema del sexo, no voy a opinar, ya que cada una es todo lo open-minded que quiera. Pero me atreveré a aclarar que en esta fase, suele comerse pan, y beberse agua. SEGUNDO MES: Raíces Cada día le quieres más, te sientes feliz a su lado, afortunada. En esta fase comienza a nacer la confianza entre el uno y el otro. No hablo de la confianza de "lo tuyo es mio y lo mio es tuyo", no, hablo de la confianza de hablar de cada cuanto vas al baño, y otras ventosidades. Vuestras salidas se van prolongando, y el deseo va creciendo, los besos queman y las manos suben y bajan. Sabes que es la persona ideal para ti, y estás dispuesta a darlo todo por él. Sus amistades siguen siendo santos de tu devoción, pero, sin querer, sin darte cuenta, cada vez que sale el nombre de su querida amiga, involuntariamente, un pequeño tic ataca tu ojo, pero solo unos segundos, ya que solo son amigos. Tú, por supuesto, callada, que es más sexy. Para él cada día estás más guapa, y tú no puedes evitar pintarte como una puerta del palacio de la Zarzuela cada vez que vas a verle, que no se noten las ojeras/granos/y otros etcéteras. Este aspecto cambiara enseguida, ya verás. TERCER MES: El tic pasa a ser TOC Te cuenta sus problemas, te sientes especial por ser la única que los sabe, y tú haces lo que sea para solucionarle la vida. Te sientes realizada. Tú también le cuentas tus movies con tu mejor amiga que es bipolar pero a la que quieres más que a tu madre. El te dice que no te rayes, y tú encuentras es sus palabras más consuelo que en un sabio consejo de cualquier otra persona con dos dedos de frente. Es tu hombre. Sin embargo, inconscientemente, tu chico, tu príncipe, tu amor eterno, el futuro padre de tus hijos te dice, tras una larga y fructífera conversación por teléfono, whatsapp, tuenti etc, "cariño, me tengo que ir, he quedado con Silvia" y tu tic en el ojo comienza a aumentar gradualmente, pero sientes que viene un vómito imparable de palabras, y no puedes evitar decirle, muy a tu pesar "¿Quién es silvia, Pastelito?" y él, concienciado, te contesta "Mi amiga, si te he hablado muchas veces de ella, princesita", y tú, terriblemente arrepentida por haber preguntado, le dices "Oh, claro, disculpame, tienes razón, dale un beso de mi parte, y dile que le he hecho un bizcocho". El se va, tu te quedas con la mirada perdida en un punto fijo de la habitación. Aún tu imaginación no se ha activado, esa es otra fase del noviazgo, pero irremediablemente, abres el portátil, te metes en el perfil de tu tocinito de cielo, y en el buscador de amigos introduces: Silvia. Qué guapa es, que alta, que delgada, que tetas, que sonrisa profident, que ojos más bonitos, la perfección personificada ha quedado con mi novio, oh no, siento como si mis inseguridades echaran raíces en mi, oh no ¿Qué haré?. Te pasas toda la tarde pensando en Silvia, llamas corriendo a tu mejor y bipolar amiga, se lo cuentas, la llamais zorra como unas siete o veinte veces, y acto seguido colgais. Y es aquí, donde, querida amiga, tu tic se convierte en TOC, para los cortitos, trastorno obsesivo-compulsivo. CUARTO MES: Rutina Aún te queda un poco de bilis en el esófago, tras la quedada del mes pasado de tu pastelito de crema con la tal Silvia de los cojones. Pero has conseguido superarlo, dejaste el budú atras, y has sabido seguir adelante. Las conversaciones por teléfono comienzan a ser más cortas, pero, hay que estudiar, escasea el tiempo, y los temas de conversación disminuyen en un 3%. Pero no pasa nada, tu le amas, el te ama, y os lo decís todos los días. Sexo salvaje para unos, abstinencia para otros, al gusto del consumidor. Solo te digo, que el pajarito de tu bollito de canela estará comenzando a adquirir un tono violáceo. No hay mucho que decir de este cuarto mes, ya que la rutina comienza a apoderarse de vuestra relacion. Os gusta, habeis conseguido amoldaros a la vida del otro, y eso es importante. QUINTO MES: Silvia, querida Silvia Ya son cinco meses, los cinco meses más felices de mi vida y otros muchos títulos de tablones dedicados en el tuenti. Qué monos. Llega el sábado noche, tú estás de exámenes, y tienes que estudiar, y descansar, no hay tiempo de salir de fiesta. Sales un par de horitas a media tarde para comerte la boquita de caramelo de tu churri. Vuelves a casa y oh, un mensaje: "Ya te echo de menos peque. Esta noche voy a salir con estos cabronazos hijos de puta (ahora los hombres muestran su cariño hacia sus niggas con tan bonitos criterios) de fiesta por X zona de fiesta de vuestra respectiva ciudad, en mi caso ATALAYAS. Así que no podre oir tu delicada voz esta noche. De todos modos te dejare un lindo mensaje de buenas noches. Te amo pajarito de esta jaula que es mi corazón" Y tú dices oh, que rico es, ojalá se lo pase super genial de bien. Tras esa reflexion, llegas a casa, te sientas en tu mesa, abres el libro, y la zona b de tu cerebro empieza a emitir un: MEEEEC MEEEEC PELIGROOO PELIGROO!!! y recuerdas que tu queria Silvia saldrá esa noche como cada noche de cada fin de semana de su asquerosa vida. Y decides cerrar el libro, irte al sofa, ponerte la tele y ver cualquier mierda con tal de no entrar en una crisis nerviosa altamente preocupante. Finalmente te duermes, y, a las 6 de la mañana te despierta una vibración bajo tu cráneo. Y oh, es el, tu amor verdadero: "Mi vidaaaaaa, llevo un pedo que no me tengo en pie. Me lo estoy pasando genial, mis amigos estan loquísimos. ¿Sabes a quién nos hemos encontrado? a Silvia, está aquí conmigo, te manda muchos besos. Dulces sueños mi amor, que descanses. te amo vida mía". Entonces tu te metes los besos de Silvia por el culo, y continúas en tu letargo. Al día siguiente, actuarás como si nada hubiera pasado, y tu novio te contara cada detalle de la fiesta pro de la noche. Te dirá la verdad, que Silvia se quedó zorreando, y que él y sus amigos se fueron a por churros, y luego a dormirla. Respirarás hondo y dirás "que mono es", pero no flipemos, que tu "alerta Silvia" no va a desaparecer. SEXTO MES: Lo que me gusta, y lo que no me gusta de ti Este mes es un mes clave, es el mes en el que tu pompa de felicidad comenzara a bajar a la tierra. Os seguís adorando, y compartiendo, y riendo, y esas cosis, pero ahora sacarás pecho, y te pondrás los pantalones de esta tu relación. Tu principito no estudia, sale todos los días, se pelea con tu adorada suegra, y un sin fin de cosas que a ti no te gustan y que tú, como ama y señora de la situación, le reprocharas sin remordimientos. Aquí comienzan los pequeños conflictos que arreglareis con polvos de reconciliación, o, para los más abstinentes, con conversaciones serias y disculpas por ambas partes. No te equivoques, porque con sus defectos, manías, y desequilibrios mentales, él sigue siendo tu favorito. SÉPTIMO MES: The big conflicto En este mes, sufriras, si no lo has hecho ya. Las peleas se multiplicaran, empezareis a sacaros de quicio el uno al otro, pero aprendereis a aceptar los errores del otro. Puede que te pases una semana sin hablar a tu pequeña chocolatina, pero nada que no tenga solución. Los celos, ai los celos. Los celos iran creciendo, rápido, muy rápido. Le confesaras a tu pareja el odio que sientes hacia Silvia, y lo poco que te gusta que ella este cerca de él. Pero para él esto supondrá una situación de ternura. Serás su pequeña niña celosa que se preocupa sin motivo, porque él siempre será tuyo. Aún con esas, tu desearas que al padre de Silvia, le destinen a Afganistán y que ella y toda su familia tengan que largarse muy lejos a bailar la danza del vientre.

Solo tuya.

-Cariño ¿a ti te gusta como hago el amor?
-Claro
-¿Dirias que soy bueno?
-Pff... a ver, para mi eres perfecto, pero no se, no tengo referencias de otros hombres ya que tu fuiste el primero, así que tampoco sabría contestarte con certeza
-Pues si te interesa, otras muchas han dicho que si que lo hago de puta madre
-No me interesaba, la verdad
-Haz entonces como si no hubieras leido nada
-No es bonito saber que es lo que piensan las otras, preferiría incluso no saber que ha habido otras antes que yo.
-¿Por que?
-Porque tú si que has sido el único para mi y serás el ultimo, y me encantaría poder decir lo mismo en mi caso
-Tú seras la última
-Pero no la primera...

Duele eh? esta entrada va por todas aquellas chicas que se dieron por completo a un chico que ya no era virgen. Si realmente duele, y si jode que no veas. Pensar que no ha sido solo tuyo y que tú si has sido solo suya...

Corrupted

Suena It wasn't me, Laura se despierta sobresaltada y mira el reloj. Las 12 y media del medio día de un domingo ¿quién en su sano juicio llama a esas horas?
-Mmmm si?
-Lali
-¿Quién es?
-Soy papá
-¿Quién?
-Vamos Lali no seas cínica
-¿Que quieres Roberto?
-Odio que me llames así
-Desde que te fuiste de casa has perdido todo el derecho a opinar sobre lo que digo o lo que dejo de decir. ¿Me vas a decir que quieres?
-Me encantaría que vinieses a cenar conmigo. Estoy firmando un contrato muy importante para representar a una clínica privada que es...
-No
-¿Me dejas acabar?
-No quiero ir a ninguna cena de trabajo contigo como tu dama de compañía
-Irás como mi hija con la que no comparto más de dos minutos desde hace 15 años
-Pues cuando tengas un rato libre para tomar un café como las personas normales pasate por la cafetería y sabrás algo más de mi
-Te prometo que si vienes a la cena, después te invitaré a un trozo de tarta de chocolate en Justin's, como en los viejos tiempos...
-¿Y en qué consiste esa cena exactamente?
-Me reuno con un par de empresarios y un doctor que quiere abrir una clínica privada en New Side. El tipo ese es un poco sucio, ya sabes, está metido en drogas, no tiene un duro y se las da de tipejo trajeado. El caso es que quiero quitarmelo de encima de una vez, firmar el contrato de representación y pasar a otra cosa. No me apetece tener mucho trato con una persona que se agencia fármacos ilegales directamente de laboratorios clandestinos
-Y si es tan sucio y rastrero ¿Porqué lo representas?
-Porque tengo que dar de comer a tres bocas, y me ofrece una cantidad bastante más que razonable
-¿Tres bocas?
-Lindsay ha tenido mellizos
-Ah..
-No te alegras por mi, Lali?
-Claro que me alegro papá, enhorabuena
-Los conocerás un día de estos, sabes que te puedes pasar por mi casa cuando quieras. Lindsay está deseando conocerte y...
-Tchs, no te aceleres. ¿A que hora es la cena?
-A las 8 te pasaré a buscar con el chófer
-Está bien, te estaré esperando.
-Hasta luego niña

Laura supuso que no era el mejor plan. Reencontrarse realmente con su padre después de 15 años para ir a cenar era genial, pero esa gente no le gustaba. Corruptos, su padre representaba a gente ilegal. Laura sabía que tarde o temprano su padre iría a la cárcel, pero esperaba no tener que experimentarlo de primera mano.

Optó por un vestido blanco y unas cuñas azules a juego con el bolso. El pelo, como siempre, suelto, y un maquillaje casi invisible. Su padre, como siempre, fue muy puntual, a las 8 estaba esperándola en la puerta.
-Estás muy guapa princesita- La besó en la frente
-Tú tampoco estás mal
-Vámonos

Llegaron al restaurante, perdido en el centro de la ciudad. Su diseño era muy bohemio, lleno de luces de colores eléctricos y snobs cenando en las 5 terrazas que rodeaban el local. Se aproximaron a una mesa donde había dos tipos, uno frente al otro. Uno de ellos era canoso, alto, delgado y muy atractivo, se trataba del socio de Roberto. El otro hombre estaba de espaldas, y no pudo realizar una descripción inmediata, pero supuso que él era el médico corrupto. Cuando se aproximaron a la mesa, Carl, el socio de Roberto se levantó de la mesa.
-Qué tal está Carl?
-Hambriento Rob, llegas tarde. Ohh...
-Esta preciosa mujercita es mi hija Laura
-Vaya... tiene los ojos de Sarah. Eres preciosa jovencita -La besó en la frente - Has crecido muchísimo. Aún recuerdo cuando caminabas torpemente en pañales -Soltó una carcajada. Cuántos años tienes ya querida?
-22, señor
-Y a qué te dedicas?
-Estoy empezando en una cafetería, es un sitio genial
-Ya... una cafetería
-Ajá
-bueno, sentemonos a cenar. Oh... se me olvidaba, Rob este es...- Se levantó de la silla y se giró hacia ellos.
-Marco - Masculló Laura, con la boca desencajada, y los ojos como platos
-Si... Rob este es Marco Falconi. Os conocéis?- Laura miró al suelo, y carraspeó
-Em... esto... papá acabo de recordar que yo... no puedo quedarme, hasta luego- Se giró y salió corriendo del local. Marco corrió detrás suya, pero ya era tarde. Laura ya había cogido un taxi camino de ninguna parte.

350Km

Solo unas horas nos separan. Quiero abrazarte de una jodida vez, quiero poder ruborizarme cuando me miras fijamente, quiero ir y no volver jamás. Quiero perderme con él, quiero un mundo contigo. Porque las palabras simplemente sobran. Es completamente imposible que algo pueda salir mal. Tú y yo estamos destinados a estar juntos. Nada ni nadie podrá hacerme sentir como tú lo haces. Porque son 70 razones escritas en un cuaderno, dos cartas, una flor, y unos 8 billetes de metro los que tengo metidos en un sobre. Y unas llaves en el fondo de un río. Un símbolo eterno.

Porque la belleza es efímera, pero el amor no lo es.

Si, son frases sin sentido unidas tras un punto, pero ¿Y qué? son las cosas que a estas horas cruzan mi subconsciente.

Madrid, tiembla, que allá voy (L)

Espectativas

Hace casi un mes que no me siento con tranquilidad a escribir nada aquí. Supongo que una serie de acontecimientos maravillosos me han dejado sin tiempo y sin palabras.
Todas mis espectativas sobre el amor, la vida, la distancia e incluso el tiempo, han dado un giro radical.
¿Y cómo puede cambiar un fin de semana la vida de una persona? Os explico. Cuando menos te lo esperas, donde menos te lo esperas, aparece esa persona que llena tu vida de experiencias perfectas. Aquella persona que da luz a mi vida y la que me hace sonreír con cada palabra la encontré en una cola de un restaurante de comida rápida. Madrid... esa preciosa ciudad que a más de uno habrá enamorado, tiene la culpa de todo esto.
No se como explicarlo, pero, es una sensación de estar todo el día flotando en una nube, de no querer bajar nunca y de no concentrarse en otra cosa que no sean sus besos, sus caricias, su voz...
Él tiene bloqueados mis pensamientos y mis emociones. No hago más que decir, va, María, céntrate, aprende a llevar las dos cosas con la mejor responsabilidad posible... pero es que algo así nunca me había pasado, y no se como llevarlo. Supongo que con el tiempo me acostumbraré.
Acostumbrarme a él... a mi mitad.
Lo echo de menos a cada segundo, pero lo bueno de todo esto es que nos demostramos día a día lo mucho que nos queremos, porque no podemos parar de pensar el uno en el otro. Y lo mejor es que yo ya no me imagino un futuro sin el, sin sus locuras, sin su sonrisa, sin su voz... me resulta absurdo el no tenerlo en mi vida.
Se lo que siento, y estoy segura de ello. Yo siempre he sido una chica que se agobia a la mínima, que no le gusta que estén encima suyo las 24 horas del día, que no soporta tener que verlo todos los días, que se cansa pronto... pero cuando pienso en él, solo tengo la necesidad de tenerlo las 24 horas del día, verlo todos los días, reír y vivir junto a él. Pero la distancia es lo único en lo que hemos fallado amor.
Son solo 350 km, y sabes? le van a dar por culo a la distancia.
Mi amor por ti es más grande que unos absurdos kilómetros.
Y ya no es un simple te quiero, es un te amo, te amo más que a nada en este mundo, y no quiero perderte nunca, porque el simple hecho de pensar en perderte hace que me derrumbe, que mi cuerpo se llene de escalofríos y que no salga el sol.
Porque lo eres todo.
Te amo.

Calle abajo

-¿Qué tal te fue anoche?
-Bien... muy bien
-Cuéntame pequeña- Le dio pequeños codazos en el costado
-Ai, déjame
-Ohhhhh... a Laura le han dado un besito aquí- Posó su dedo en el labio de Laura
-¿Tienes cinco años? por favor Jake, deja de hacer el tonto
-¿No me lo piensas contar?
-Va... siéntate- Apoyó los codos en la barra- bien... me llevó a un restaurante perdido en Detroit
-Il Gabbiano
-Si, ¿Cómo lo sabes?
-Es... complicado. A lo mejor no te lo debería contar...
-Dime
-Allí fue donde le pidió la mano a una chica fue en la fiesta de la facultad, y ella le rechazó
-Si, me lo contó. Nos encontramos con ella mientras cenábamos
-Oh, bueno, continúa
-Nos lo pasamos bien, hablamos, nos reímos, nos conocimos mejor... no se, fue agradable. Luego me acompañó a casa y nos dimos un beso, ya está, no pasó nada más.
-Así que ahora eres mi... ¿cuñada?
-No, no soy tu cuñada, Marco y yo no estamos juntos.
-Pero lo estaréis...
-No lo creo. Pero bueno, vamos a esperar a ver que pasa.
-Esta bien. Bueno, ahora atiende esa mesa y...
-Oye Jake. Mira, te voy a ser sincera ¿vale? hay alguien que nos vigila, y me estoy asustando
-¿Qué?- Jake soltó una carcajada
-Jake, es enserio, alguien nos vigila
-¿A ti y a mi?
-Si Jake, si
-¿Y porque dices eso?
-El otro día, cuando viniste a mi casa a visitarme cuando estaba enferma, dejaste una bolsa con chocolate y demás en la mesa de la cocina antes de irte
-Si
-Cuando fui a abrir la bolsa, encontré esta carta- Se sacó el sobre del bolsillo de los vaqueros y se la dio al muchacho. Jake la leyó de arriba a abajo, unas cuantas veces, y su sorpresa fue mayor a cada palabra que leía
-Esto no lo he escrito yo Laura
-Ya lo se
-Seguro que ha sido Marco, quería gastarnos una broma...
-No, Marco no ha sido, ya le pregunté y me lo negó
-¿Y ahora tienes confianza plena en el?
-No es eso Jake, no pudo ser el
-Me lo crucé en la escalera de tu edificio, seguro que metió la carta en algún momento en el que me despisté. Se va a enterar...
-No fue el Jake
-Dame una razón de peso por la que debería pensar que no fue el
-¿Porqué iba a hacerlo? no tenía ningún motivo. Él me iba a pedir salir horas después, no iba a hacer que te declarases. Podría haber corrido el riesgo de que yo sintiera lo mismo por ti.
-Ya... y no es así ¿no?
-No, me habría lanzado a tus brazos al día siguiente en la cafetería. Y tú me habrías puesto cara de... ¿Que coño haces Laura?- Laura soltó una carcajada
-Si, la verdad es que lo habría flipado un poco- Jake sonrió
-El no ha podido ser
-Yo no lo veo tan claro
-A parte el pasó la noche en mi...- Laura miró al suelo. Se dio cuenta de que había hablado de más.
-Que pasara la noche en tu edificio no justifica nada. Pudo ser el perfectamente- Marco entró por la puerta en ese preciso instante.
-¿Qué pasa hermanito? Hola Laura- Saludó a Laura dándole un beso en la mejilla
-¿Porqué eres tan gilipollas?
-Jake, Jake, Jake... con insultos ya tan temprano... ¿Te has levantado de mal humor?- Dijo Marco con sorna
-¿Porqué escribiste esta mierda?- Jake le tiró a la cara el sobre con la carta
-¿Cómo?- Marco cogió la carta y se dispuso a leerla en voz alta- Querida Laura, no me he atrevido a hablar esto contigo aún, blablabla, me importas más de lo que esperaba, ohhhhh conmovedor, las cartas de amor no son mi fuerte... oh Jake, que tierno eres, esto es tan...- No le dio tiempo a terminar, Jake le propinó un puñetazo en la cara.
-¡Jake que coño haces!- Gritó Laura
-¡Es un gilipollas y un prepotente y estoy harto!¡Yo no he escrito esa carta!
-¡Ya ha quedado claro que no la has escrito! ¡Ya ha quedado claro que tú nunca podrías sentir algo así por una chica como yo! ¡ya lo he entendido!-Gritó- ¡No tenías porqué pegarle!-Jake miro a Laura. Las palabras se tropezaban en su garganta. Quería gritar, quería matar a Marco por humillarle ante la gente, y sobre todo ante Laura. Pero no podía gesticular, no podía sacar todo lo que tenía dentro. Salió corriendo de la cafetería, calle abajo.
-Ah, joder ¿Jake hace pesas ahora? dios...
-¿Estás bien?- Laura rodeó la cintura de Marco y lo llevó como pudo a la cocina- Ya es la segunda vez que te tengo que llevar en brazos en dos semanas- Sonrió
-Cierto- Intentó sonreír, pero su labio partido le dio un aviso- Ah, joder...
-Ais...- Cogió un hielo y lo lió en un paño
-No me vayas a pasar ese pañuelo lleno de gérmenes por la cara. Me gustaría salir de aquí con un labio partido, no con la lepra...
-¿Te quieres callar? Esta limpio idiota... -Laura sonrió. Le pasó suavemente el paño por el labio
-Oye... ¿Porqué no le has contado que estuve en tu casa? si lo hubieras hecho nos habríamos ahorrado el show...
-Porque quiero que se lo digas tú
-Sería una tontería, ya no consumo. Podríamos contarle solo la parte en la que yo duermo en tu sofá...
-Es que no estoy segura de que algo así vuelva a pasar Marco...
-Tienes que confiar en mi... las cosas me empiezan a ir muy bien ¿sabes?- Acarició la mejilla de Laura
-Démosle un plazo de dos semanas. Si veo que todo está en orden, y no encontramos al que escribió eso, le explico que esa noche estuviste conmigo, y que llegaste a casa en malas condiciones...
-No le digas lo de la coca
-Le diría que viniste como una cuba- Laura sonrió
-Está bien... ahora habla con él, debe de sentirse mal, lo conozco.
-Eso haré. Pero tu tienes que...
-Pedirle disculpas. Lo haré, en cuanto me duela menos y pueda vocalizar te juro que voy y le pido disculpas...
-Vaya Marco, nunca pensé que eso pudiera salir de ti...
-Ya te dije que tú sacas lo mejor de mi Laura- Laura sonrió y le besó con ternura

Sacas lo mejor de mi

-Es solo una cena de amigos no te emociones- Dijo Marco
-Tranquilo, no me emocionas lo más mínimo
-Pues a juzgar por la cara que has puesto al salir del portal cuando me has visto... yo diría que un poco si...
-Las apariencias engañan
-Ya veo ya...-La miro de arriba a abajo
-¿A qué sitio monstruoso me vas a llevar esta noche?
-Yo no lo llamaría monstruoso... más bien caro
-Oh, qué clase
-¿Lo dudabas?
-Si, a cada momento
-Vaya... gracias- Sonrió

Cuando bajó del coche, Laura se dio cuenta de que estaban en mitad de ninguna parte. Al principio le dio que pensar, ya que había salido con un chico al que prácticamente no conocía, pero sus espectativas cambiaron cuando divisó al final de la colina una casa. Si gritaba la oirían.

-Caminemos un poco- Dijo Marco. Laura se cruzó de brazos, no entendía el concepto que Marco tenía de una cita. Estaban paseando por el campo.
-Si lo llego a saber no me arreglo de esta forma
-Si no te hubieses puesto tan guapa, a lo mejor no te dejaban entrar
-Pero ¿entrar a donde Marco? Estamos en mitad del campo, si es una broma no tiene gracia...
-Me duele que seas tan desconfiada Laurita...-Cuando quiso darse cuenta, un pequeño y acogedor restaurante salió de detrás de una pinada. Era como una pequeña cabaña de roble iluminada por miles de velas y una humeante chimenea.
-Vaya...
-No pretendía llevarte al campo para aprovecharme de ti, y luego cortarte en pedacitos... prefiero asesinarte cruelmente con el estómago lleno
-Oh, qué considerado eres, gracias- Sonrió. Entraron a la cabaña. Era más grande de lo que se veía desde fuera. Una docena de personas disfrutaban de su cena. Una familia, una pareja, un hombre mayor solo, que admiraba una fotografía vieja con la mirada triste. De cada una de las personas de ese hermoso lugar podía imaginarse cual sería su historia.

-Bienvenidos ¿Tienen ustedes reserva?
-Si, a nombre de Marco Falconi
-Oh desde luego, pasen por aquí por favor, les guiaré hasta su mesa
-No se preocupe, tiene usted mucho trabajo
-Que considerado es usted señor Marco. Es la de la esquina, como usted pidió.
-Muchas gracias- Marco sonrió y acompañó a Laura hasta la mesa -¿Impresionada?
-Se lo que es cenar en un restaurante caro, no vengo de una granja Marco
-Oh, eso no lo sabía, no se nada de ti
-No me has dado la oportunidad de hablarte de mi, siempre me abordas
-Cierto...¿Puedo hacerte una pregunta?
-¿Desde cuando pides permiso para algo?
-Cierto...-Esbozó una sonrisa torcida- ¿Cómo es que has accedido a venir?
-Es una historia un poco larga
-Tenemos toda la noche- Sonrió
-Está bien...-Apoyó los codos en la mesa- Antes de llegar a Michigan, vivía en Joulters Cay con mi madre. Ella se puso muy enferma cuando yo tenía 16 años. Mi padre nos dejó, y formó otra familia aquí en Michigan. Cuando mi madre muriera Max, que era mi novio entonces, y yo, teníamos planeado escaparnos unas semanas a España. Mi madre finalmente murió hace 7 meses. Max ni siquiera se presentó en el funeral. Lo esperé durante tres meses, ni una llamada, ni un mensaje, nada. Decidí seguir por mi cuenta y acabé aquí en Michigan, en un piso que mi padre me compró cuando cumplí la mayoría de edad, ya sabes, un premio de consolación. Max apareció por mi casa en cuanto llegué a Michigan. Se intentó excusar diciendo que habían tenido un partido importante, y que no sabía que mi madre moriría tan pronto. Se cree que soy estúpida. Apenas ha estado dos semanas fuera por un partido. Tres meses esperando su llamada cada noche...Y bueno, a partir de esa mala experiencia, me cuesta confiar en la gente. Siempre estoy alejando a todo el mundo de mi lado y, bueno, no alejé a Jake... ¿Porque tendría que alejarte a ti?
-Bueno... soy bastante más problematico que Jake, de eso estarás segura
-Claro- Soltó una carcajada.

Comieron acompañados de una botella de champán y una música algo cursi para el gusto de Laura, pero que se silenciaba siempre que Marco hablaba. Fue muy agradable, y mantuvieron una conversación muy larga durante toda la cena.
-Ahora toca que me hables de ti
-Bueno... mi madre murió cuando Jake y yo éramos muy pequeños. Yo siempre quise ser astronauta, como todos los niños. Pero estudié medicina. Mientras hacía la carrera me enamoré perdidamente de aquella mujer que tienes en frente -Señalo a la mesa que tenía a su espalda, era una mujer preciosa- En la fiesta de fin de carrera le pedí que se casara conmigo, me rechazó, dijo que no estaba preparada. Me enteré que dos meses después de que yo se lo pidiera, se casó con James Hugdington, un tío inglés de la facultad. Me dejó tan destrozado que desde entonces juego con las mujeres a merced de mis caprichos
-Mmmm venganza
-Si, pero creo que ya lo voy superando
-Oh si, bueno es saberlo- Marco agarró la mano de Laura
-¿Nos vamos?
-Vale

Se subieron al coche y estuvieron hablando otro largo rato sobre las anécdotas que la vida les había presentado a cada uno. Risas, sorpresas, metas...
Cuando llegaron al portal de Laura le costó mucho bajarse del coche.
-Bueno... No ha sido tan malo ¿No?- Dijo Marco
-No... me lo he pasado muy bien
-Sacas lo mejor de mi- Dijo con seriedad, hasta que no aguantó más y soltó una carcajada.
-Idiota
-Si, un poco
-Bueno... voy a subir, estoy muy cansada
-Claro, que tengas... que tengas dulces sueños
-Igualmente- Se adentró en el portal, pero Marco la frenó cogiéndola por las muñecas.
Antes de que pudiese hacer nada, Marco la besó suave, pero no fue forzado. Laura disfrutó de ese beso. Le hacía falta una muestra de cariño. Marco se fue separando poco a poco y le acarició las mejillas.
-Ahora si que tendré dulces sueños
-Que tonto eres- Le dio un pequeño beso en los labios- Hasta mañana

Laura se adentró en el portal con una gran sonrisa en la cara. Marco se llevó los dedos a los labios, donde aún quedaba algo de la fragancia de Laura.